Tipos de cáncer a detectar

A continuación se presentan los 3 tipos de cáncer a detectar: cervicouterino, mama y colon.

 

Cáncer Cervicouterino

 

La Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha declarado que el cáncer cervicouterino  es  una enfermedad en la que se presentan cambios en las células que cubren las paredes del cuello uterino (extremo inferior de la matriz que comunica con la vagina). Estas células inicialmente normales, a la postre se convierten en precancerosas.  Con frecuencia, en etapas iniciales del cáncer cervicouterino no se presentan síntomas, por lo que a menudo éste no es detectado hasta que se halla en fases avanzadas de la enfermedad. Asimismo, la OPS, hace mención de que el factor de riesgo más común del cáncer cervicouterino es la exposición a ciertas variedades del Virus del Papiloma Humano (HPV). Siendo ésta una Infección de Transmisión Sexual (ITS), en muchos casos asintomática, por lo que puede transcurrir mucho tiempo antes de que se detecte. A menudo las mujeres se infectan con el Virus del Papiloma Humano en edades entre los 20 y 30 años, pero sólo una minoría desarrolla el cáncer, proceso que puede tomar hasta 20 años.

 

           

           Figura 4. Anatomía del Cérvix

 

 

Factores de riesgo en el desarrollo del cáncer Cervicouterino

 

Los factores de riesgo del cáncer cervicouterino son tanto de condición biológica como de carácter psicosocial. Entre los principales factores de riesgo pueden considerarse:

1)    El que las mujeres no se realicen la prueba de detección periódicamente

2)    El inicio de las relaciones sexuales a una edad temprana.

3)    El tener parejas sexuales múltiples.

4)    Contraer el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) que debilita el sistema inmunológico de la mujer haciéndola más vulnerable a la infección por  el Virus del Papiloma Humano (HPV).

5)    Presentar una historia familiar de cáncer cervicouterino.

6)    Encontrarse en (el grupo de) edades  de entre  30 y 60 años.

7)    Pertenecer a un nivel socio-económico bajo.

8)    Tener el hábito de fumar.

 

 

Cáncer de seno

En el mundo, uno de los cánceres más comunes en las mujeres es el de mama. Se ha estimado que una de cada 13 mujeres se ve afectada a lo largo de su vida por esta enfermedad; aproximadamente cada año se diagnostican un millón de casos y mueren por esta causa 372 mil mujeres.

      Figura 5. Anatomía de la mama

 

Al parecer, la incidencia del cáncer de mama varía de región a región: más alta en Estados Unidos, Canadá y Australia, con una tasa de incidencia estandarizada por edad mayor de 90 por cada 100 mil mujeres, en comparación con 48 por cada 100 mil en América del Sur y Europa, y menos de 20 por cada 100 mil en Asia del este. De los 10 millones de muertes anuales en el mundo por cáncer, 10% corresponde al de mama, cifra que lo ubica como primer motivo principal de fallecimiento en las mujeres.

 

Cáncer de seno en México

 

En México, durante las últimas décadas la morbilidad por cáncer de mama en las mujeres se ha incrementado notablemente: ocupa el segundo lugar (17%), después del cáncer cervicouterino (36%). De acuerdo con el Registro Histopatológico de Neoplasias Malignas, para el periodo de 1993 a 1999 se reportó una cifra acumulada de 57 509 casos nuevos de cáncer mamario, 19 375 durante los últimos dos años. La tasa de mortalidad por cáncer de mama ha mostrado aumento constante: de 6.4 por 100 mil mujeres de 15 años y más para 1979; 13.16 por 100 mil mujeres de 25 años y más para 1990; y 17.7 por 100 mil para el año 2002.

 

El grupo de edad con mayor número de defunciones fue el de 45 a 54 años; sin embargo, el de 35 a 44 años fue muy parecido. Además, las mayores tasas de mortalidad se presentaron en Baja California Sur (19.5 por 100 mil mujeres), Coahuila, Chihuahua y Distrito Federal (tasa similar de 14.4 por 100 mil mujeres).

Se ha estimado que de cada 100 ingresos hospitalarios femeninos, 33 se deben a tumores malignos de mama. En 2002, sólo en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) se registraron 13 800 ingresos hospitalarios por esta causa. La distribución de los casos nuevos por grupos revela que el comportamiento del cáncer mamario se ha modificado y que la edad de aparición de nuevos casos es más temprana, ya que desde los 35 años se aprecia aumento significativo: 45.5% del total de casos nuevos de cáncer ocurrió en mujeres menores de 50 años, con mediana de 51 años, igual que en Venezuela y Japón, una década antes en comparación con las mujeres europeas o blancas norteamericanas.

 

En las mujeres de 15 a 44 años, la morbilidad es de 11%, con 2757 casos, cifra que casi se duplica en el grupo de 45 a 64 años (4369 casos, 68%) volviendo a descender en las mujeres de 65 años o más (1839 casos, 71.7%).

 

En México, la magnitud del problema se puede explicar cuando se conoce, por un lado, que para el año 2020 el número de mujeres de 25 años o más (edad de riesgo para presentar cáncer de mama) alcanzará los 29.7 millones; y, por otro lado, que el porcentaje de mujeres en quienes se hace el diagnóstico oportuno no supera 10 % y la utilización de los servicios de detección oportuna de cáncer mamario no sobrepasa 55%.

 

Factores de riesgo

 

Hasta el momento no existe una causa específica para desarrollar cáncer de mama; sin embargo, se conocen varios factores de riesgo, involucrados y relacionados directa o indirectamente con las hormonas reproductivas, en particular con la exposición prolongada a los estrógenos y progesterona. Se ha comprobado que el riesgo para desarrollar cáncer de mama se incrementa con la edad a partir de la cuarta década de la vida. La probabilidad de desarrollar cáncer invasor en los siguientes 10 años es de 0.4% para las mujeres entre 30 y 39 años; 1.5% para las mujeres entre 40 y 49; 2.8% para mujeres entre 50 y 59; 3.6% para las mujeres entre 60 y 69.5 años.

 

Diversos estudios epidemiológicos han demostrado también asociación entre el cáncer de mama y la menarquía temprana (antes de los 12 años), nuliparidad o paridad a edades tardías (después de los 35 años), menopausia tardía, alta densidad del seno en la mastografía, terapias hormonales de remplazo, uso reciente de contraceptivos orales. Un meta análisis de 51 estudios epidemiológicos que involucra 52 705 mujeres con cáncer de mama y 108 411 mujeres sin la enfermedad, reveló que la terapia hormonal de remplazo por periodo prolongado es responsable del exceso de casos de cáncer de mama, más de lo esperado normalmente en las mujeres entre 50 y 70 años no usuarias de la terapia hormonal.

 

Otro meta análisis de 54 estudios epidemiológicos ha reportado incremento de 24% en el riesgo para desarrollar cáncer de mama en mujeres usuarias de anticonceptivos combinados, independientemente de la dosis, edad de inicio, duración del uso o antecedente familiar de la enfermedad. Este último es otro factor que aumenta significativamente el riesgo. Se ha estimado que el riesgo relativo para las mujeres con uno, dos, tres o más familiares con cáncer de mama es de 1.8, 2.9 y 3.9, respectivamente, en comparación con las mujeres sin esta condición.

 

El antecedente de abultamientos benignos en mama aumenta cinco veces el riesgo de desarrollar cáncer de mama en comparación con las mujeres sin cambios benignos en la mama.

 

Se ha encontrado también que la obesidad en la mujer posmenopáusica, estatura alta, exposición a las radiaciones, consumo excesivo de alcohol, tabaco y falta de ejercicio físico, son factores de riesgo para cáncer de mama.

 

Numerosos análisis epidemiológicos se han enfocado en los factores que poseen una actividad protectora contra el cáncer de mama. Se ha observado que la edad temprana en el primer embarazo, paridad alta, lactancia prolongada, dieta enriquecida con frutas, verduras y grasas polinsaturadas omega-3 y algunos agentes químicos (tamoxifeno, inhibidores de COX-2 y de aromatasa) protegen contra el cáncer mamario.

 

 

Cáncer de Colon

El cáncer de colon o adenocarcinoma colorectal es un tumor maligno que se origina dentro de las paredes del intestino grueso, incluye los segmentos: ciego, colon ascendente, colon transverso, colon descendente, sigmoides y recto. Se piensa que muchos de los casos de cáncer de colon nacen de un pólipo adenomatoso en el colon. Estos crecimientos celulares en forma de hongos son usualmente benignos, pero de vez en cuando se vuelven cancerosos con el tiempo. El cáncer de colon no incluye los tumores en los tejidos del ano o del intestino delgado.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Figura 6. Anatomía del colon

 

 

 

Epidemiología

Estudios epidemiológicos describen sin asociación entre la ingesta de frutas, verduras y el cáncer de colon (CC) [10]. Existen diversos estudios que demuestran controversia entre la ingesta y la cantidad de diversos micro nutrientes como lo son los siguientes:

  • Calcio.
  • Vitamina D.
  • Vitamina E.
  • Folatos.
  • Metionina.

Asociado a la prevención del CC.

 

Factores de riesgo

La localización anatómica del CC se relaciona con la edad, sin diferencia en relación al género y la raza.

  • La migración proximal del CC, se atribuye al envejecimiento de la población. Con la consiguiente disminución en la incidencia del CC distal y un incremento en la región proximal.

Hay dos síndromes genéticos específicos que predisponen al CC:

  • Poliposis adenomatosa familiar.
  • CC hereditario no asociado a poliposis.

Un meta-análisis de 27 estudios demostró que en los individuos con al menos un familiar de primer grado afectado, el riesgo es mayor al doble de la población general.

  • Se ha propuesto la dieta como un factor que predispone para el desarrollo del CC, sin embargo, existe controversia respecto a los nutrientes específicos o combinaciones de éstos.

 

  • La ingesta de calorías predispone al desarrollo de CC en relación directamente proporcional a la cantidad de la ingesta.

 

  • La ingesta de carnes rojas y grasas. Se considera carne roja con grasas:
  • Carne de cerdo.
  • Ternera.
  • Cordero

Clasificar a los individuos de acuerdo a su riesgo como población de riesgo bajo para CC:

  • Individuos sin factores de riesgo para CC con edad > a 50 años.

Se recomienda escrutinio de CC en individuos asintomáticos considerados como población de riesgo bajo:

  • Mayores de 50 años, en afro americanos a partir de los 45 años.
  • Sin historia personal de enfermedad inflamatoria intestinal.
  • Sin historia familiar de CC.
  • Sin historia familiar de pólipos adenomatosos.

Población en riesgo intermedio para CC en presencia de:

  • Pólipos de colon adenomatosos y hamartomatosos (exceptuando pólipos hiperplásicos). Se considera que los pólipos constituyen una lesión pre maligna con una razón de momios de 2-4.
  • Enfermedad inflamatoria intestinal con 10 años o más de evolución, con asociación a la formación de pólipos y CC con razón de momios de 5.6.
  • El intervalo de tiempo para el desarrollo de cambios malignos en los pólipos adenomatosos se estima entre 5 a 25 años.

Población en riesgo alto para presentar CC:

  • Individuos con historia familiar positiva.

Las pruebas genéticas de CC hereditario no poliposico (CCHNP) está indicado para los individuos afectados considerados “población de alto riesgo” en las familias que reúnan las siguientes características (ver clasificación o escalas de la enfermedad):

  • Criterios de Ámsterdan.
  • Criterios de Bethesda.
  • Criterios modificados de Bethesda.
  • Familiares de primer grado de los individuos con una mutación conocida.
  • Individuos con los dos tipos de CCHNP.